Jamás se olvida, mas siempre desgarra.
Siempre desteñido aunque no se borra.
No es real,
no es sano,
cuando acabas tan dañado...
tan desgastado.
¿Amor falso?
Más bien raro,
bizarro,
sin suspiros
ni amarros.
Tal vez surreal,
tan bello y a la vez tan blando...
más oscuro pero tan claro.
Jamás se olvida, pues es reminiscente.
Tiene un lugar especial,
oculto en la superficie.