Un día desperté y estaba todo cubierto.
¿Quién me puede ver, en esta noche tan oscura?
Destellos a lo lejos que alumbran mis dudas,
un día desperté y no tenía ni cordura.
¿Quién puede aparecer, en esta noche tan oscura?
Aquí a mi lado una estrella se dibuja,
está sola y cambiando, pues no baila sin cesura,
necesita de mi llanto para poder sentir la luna.
¿Cómo acabo sonriendo, en esta noche tan oscura?
A veces toco con las manos tan penetrante amargura
y quiero controlar con los dedos esta gran armadura.